viernes, 2 de enero de 2009

Aclaración

Hola a tod@s, en especial a Isa, feliz año nueve.
Para ver los textos del Scribd haced click en el cuadro más a la izquierda (rectángulo negro con cuadrado gris dentro).

2 comentarios:

Anónimo dijo...

feliz 3009, tu as puesto feliz año nueve xd, asi q hay t dejo eso

q pases unas felices fiestas

eloy quilez dolz

Anónimo dijo...

Preámbulo a las instrucciones para reír

Cuando alguien te hace reír no solo provoca la risa, provoca el crecimiento del monstruo del buen humor. Provocan que la risa crezca y crezca hasta que ya no puedes aguantar más y cuando, por fin la sueltas, un leve dolor de barriga y/o de mandíbula aparece. No solo te dan las ganas de reír, sino que además intentan que esta risa se alargue, enganchándote a una especie de sustancia invisible que hace que no puedas parar durante un buen rato. Te ofrecen la posibilidad de salir de la rutina diaria durante un breve momento, y lo que viene después, el sentimiento de que no ha durado casi nada, y de que, aunque te apetezca volver a reírte con ganas no puedas, mientras la sensación de haberte reído con fuerza se apodera de tu cuerpo.


Instrucciones para reír

Todos nacemos con un monstruo del humor dentro de la barriga que aprovecha cualquier oportunidad para escapar. Cuando una situación, un chiste o cualquier otra cosa nos hace gracia, alimentamos a ese monstruito que aprovecha para impulsarse y hacer fuerza para trepar por nuestra garganta y salir por nuestra boca. Pero no tengáis miedo. Es muy fácil dejarle salir, solo abrid la boca y haced todos los movimientos que el cuerpo necesite, y no le deis mucha importancia al dolor de barriga y mandíbula, que no tarda mucho en menguar, una vez el monstruo haya podido escapar. Cuando más gracioso nos parezca algo más fuerza adquiere nuestro pequeño bichito, y por eso no es de extrañar que a veces, acabemos incluso llorando.


Beatriz Navarro Mon n14 4ESO B